Ceremonia presenta su nueva colección “Fantasma: Fluir, no ser, desaparecer”, la cual es sobre las adolescencias góticas, sobre la música y el espíritu de todos aquellos oscuros y acomplejados adolescentes de los 2000. Es sobre estas mezclas, entre todas las influencias punk británicas, el desenfado americano de los noventa y la creciente influencia asiática de los 2000. Es sobre la música, Joy Division, Bauhaus, Siouxsie and the Banshees, Nick Cave, hasta Lacrimosa, Evanescence, Lucibell y Saiko, y la lista podría seguir.
“Todo esto me llevó a pensar en todos aquellos góticos y jóvenes oscuros de mi época adolescente y en esta creciente oleada de información, porque crecimos en el auge de las redes sociales y con una incipiente influencia asiática” nos cuenta Christian Palacios, el diseñador tras Ceremonia.
Pero Fantasma es también un manifiesto sobre que es Ceremonia hoy, paradójicamente, la idea de no ser, no pertenecer, trascender más allá de las apariencias y las estructuras propias del vestuario, la libertad creativa y estilística. “Trata sobre mi nuevo tipo de cliente, ese cliente mucho más fluide donde las concepciones del género y el cuerpo ya no tienen la connotación de antes, donde la ropa debe ser para todes y hay que estar a la altura de ese desafío. La moldería cambió: la ropa se adapta al cuerpo que quieres mostrar, te cubre y protege si así lo quieres, es ambigua y transgrede normas establecidas” dice Christian Palacios. Como un Fantasma, fluir sin tener un cuerpo, sin tener un género o edad, fluir más allá de las expectativas que impone la sociedad actual. Las prendas son las clásicas estructuras – camisas, pantalones, chaquetas – pero se deconstruyen o desproporcionan, las siluetas son largas, y la ropa genera volúmenes que al no tener estructuras, caen. “Todo esto configura el estilo de la colección, muy lánguida, oversize, sin estructura y con un toque un poco viejo y nostálgico.”
Mencionas que Fantasma es «Fluir, no ser, desaparecer», ¿a qué te refieres con eso? ¿Qué quieres impulsar con Ceremonia?
Habla sobre la idea de este ser Fantasma, la idea de no encajar, no tener un cuerpo definido, de no estancarse, de bajarse un poco del carro del ego social y medial actual, y perderse entre estas capas de ropas y telas.
Con Ceremonia quiero impulsar que la ropa de autor debe ser eso; autoral, un poco escapista, debe ser especial y hablar de las motivaciones de quien está detrás de cada pieza.
Hoy producir colecciones autorales en las condiciones del mercado actual y en la forma en que se consume en este país, se vuelve para mí un acto político. Si además le agregamos elementos de sustentabilidad o el hecho de querer contar historias o puntos de vista. La ropa ya no solo es un producto de consumo, son ideas, son manifiestos y soluciones y por ende se debe valorar y sobre todo cuidar.
