«El reverdecer en lo que para nosotros tiene valor. Crear un mundo onírico en la mente para rescatar lo perdido; ¿tú crees que este sentimiento es real y tangible? Necesitamos esa conexión a la raíz. Desde el origen y el todo, donde te acurrucas para no sentir inseguridad. Desde ahí venimos. Del barro.»