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Un cambio ya se consolidó. Un abismo ya se recorrió. Un dolor profundo, profundísimo en el cora, un forado en el pecho que atravesaste y te hizo ver. Porque, como Orfeo, tu camino hacia la persona amada fue también un encuentro contigo misma y tu demonio. La visualización de las consecuencias nefastas de tus acciones, tomadas pensando que era lo mejor. Y por eso mismo, hay un abrazo que necesitas darte, un perdón que necesita decirse, o mirarse. A la cara o de costado.
Aries regida por Marte, dios de la guerra.
Querida ariana, abril será un espacio para soñar en concreto. O sea para dejar que tu intuición guíe tus palabras y los contactos que puedas hacer con ellas para alcanzar lo que ahora último, el mes pasado, se va perfilando como la misión que quieres cumplir, al menos con lo que te queda de vida. Y no es que te vayas a morir mi amorcita, si no que la vida es finita, los años pasan como agua entre las dedas, etcétera. Entonces querrás apurarte pero ahí un poquito de cuidado, porque puede que aún no sea el momento de desplegar toda tu trama y que todavía debas esperar a mayo para ser la reina del show.
Tauro regida por Venus, diosa del amor.
Puede que te des cuenta que en realidad deseas algo que no está muy aceptado: algo tildado de oscuro porque está negado o reprimido por la sociedad, pero que para ti significa la libertad de ser tú misma. Y que este mensaje te llegue en sueños o en un contexto de soledad contigo; o a lo mejor, vehiculizado por alguien que para ti es autoridad espiritual, y que podría hacerte ver de otra manera lo que antes parecía imposible. Venus en Piscis te tendrá más caliente de lo usual, que ya es bastante, y te debatirás entre quedarte encerrada con la amante o salir de fiesta a por todas. Cuidado con los excesos.
Géminis regida por Mercurio, dios de la comunicación.
Yo veo instancias donde tu alegría, tus ganas imparables de vivir se topan con la necesidad de detenerte a contemplar las heridas que has dejado en las demás; seguro te dará cringe pero es porque, precisamente, habrá algo qué resolver con quien amas, o amaste. Y puede que ahí encuentres algo: una enseñanza, un deseo de cambiar, a lo mejor siendo un poco más artística o más creyente o más espiritual, o a lo mejor el reverso de esto: vengativa hasta intentar destruir a tus enemigas reales o ficticias. Sugiero concentrarte en lo real, y no en el producto de tu afiebrada imaginación.
Cáncer regida por la Luna, diosa madre.
En una de esas se te andan mezclando las cosas: las palabras con las personas, las autoridades con los sueños, en una amalgama que puede que te confunda, pero que también tenga destellos de genialidad en relación con lo que quieres y cómo manifestarlo, viabilizarlo mediante los acuerdos y los argumentos, la sumisión a la norma y también su evasión (necesaria). Presta atención a las señales, a esos momentos donde todo se disuelve para evidenciar algo, porque puede que sea el tiempo de la rebeldía pero en secreto, callada, piolita haciendo lo que quisiste hace tanto tiempo amor.
Leo regida por el Sol, astro rey.
Abril te mostrará un deseo reprimido en una visión que caerá sobre ti como un rayo, y tendrás ganas de contarle a todo el mundo, pero a lo mejor no será el momento: puede que no entiendan, se asusten. Porque tal vez ese deseo debe mantenerse oculto, agazapado, mirando de reojo a las demás sin que se den cuenta, hasta construir las bases de algo nuevo, algo raro, y que así, ya sostenido, pueda salir a la luz. Y esto puede que te lleve a ver algo muy claro: los caminos del dolor también llevan al poder.
Virgo regida por Mercurio, dios de la comunicación.
A ti que tanto te gustan los detalles, puede que te encuentres con que las fronteras de las cosas y las situaciones y los lenguajes se difuminan, o desaparecen, y te sientas perdida, sin capacidad de direccionarte, porque, ¿dónde están estarán los signos? Ahí yo le haría caso a mi intuición y no actuaría sin meditarlo: a lo mejor es tiempo de distinguir entre el nerviosismo y el presentimiento, de dirimir cuándo te estás engañando y cuándo le achuntas, de real. Momento para amar mucho, y perdonar.
Libra regida por Venus, diosa del amor.
Puede que esta sea la ocasión de confiar en tus propias palabras, en tu capacidad infinita para llenar de armonía el vacío, y seducir con tu mensaje sofisticado, porque tú, siempre, la más apolínea mi reina. Y así llevar tu retórica a un nuevo nivel, mucho más engrandecida y platuda y por eso mismo, poderosa en este mundo heterocapitalista patriarcal. Y para eso quizá tengas que dejarte llevar por lo que se adivina o se asoma, lo que se difumina para aparecer de otra forma, aceptando definitivamente el pasado, lo que duele, la norma pero no para favorecerla, sino no más por sobrevivencia.
Escorpión regida por Plutón, dios de la muerte.
Puede que sea un mes que disfrutes especialmente estando en una orgía contigo misma o con las reales, bien escondidas en un sótano o la campiña, y que allí descubras que no quieres seguir más dentro de cierto orden que ya no te pega, que debes abandonar para poder continuar tu camino hacia la transformación eterna. Y en ese intento de soltar amarras para ser fiel a ti misma, a lo mejor ves que necesitas dar cariño a ciertas personas medio olvidadas, porque eso se te devuelve, y te alimenta.
Sagitario regida por Júpiter, dios del relámpago.
Puede que este mes te enfrentes a hablar mucho en un lenguaje extraño. Que sientas que no vas a poder dominar el destino, y tengas miedo de ser triturada, aunque en realidad sea un llamado a saltar sin ver todavía el fondo, a confiar en tu poder de aprender rápido, en la expansión que te constituye, que siempre te ha constituido, aunque todavía no tengas claro la dirección ni el sentido de todo esto. Eso se irá revelando, falta todavía película, y por mientras a controlar la impaciencia cochita hermosa. Hazle caso a lo que adivines.
Capricornio regida por Saturno, dios del tiempo.
Mes para ser replegada, bien tú, aislada del mundo porque todas son ineficientes o te roban la energía. Y en un sentido, así es. Tal vez ese encierro parcial pueda ayudarte a encontrar una solución impensada para una incomodidad que vienes arrastrando con la dinera, o la sexualidad, o incluso tu casa mi reina. O sea que momento de escuchar las pequeñas revelaciones de lo íntimo, de estar atenta a los sueños y los mensajes inconscientes de las otras, las capaces de comunicarse contigo más allá de los límites, aunque no las veas tanto.
Acuario regida por Urano, dios del cielo.
Quizá tu verborrea te da la oportunidad de conseguir mucha plata o a lo mejor hasta una casa, pero en un lugar que es diferente a lo que conoces o habías pensado. Y que ese sea el espacio para rearmar tu deseo, moldearlo para buscar ese desborde, ese romper límites que en realidad, se encuentra en la base de quien eres. Y será algo nuevo porque más sexual, más emotivo en la necesidad de rodearte de cuerpos, corazones y no tan solo mentes y memes.
Piscis regida por Neptuno, dios del mar.
Muy removida por las circunstancias: fundida con el todo y a la vez, viendo que es necesario separar ciertas cosas para que el todo ande. Quiero decir que será un mes de poner límites en el lenguaje, de poner límites a las personas más amadas, y tal vez incluso a tus sueños. Y no para renunciar a ellos, sino para envolverlos de un amor que permita encausarlos, actuando con calma y disciplina para abrirse a aprendizajes inéditos, a personas que pueden transfigurar tu sentido de pertenencia, e incluso de individualidad.
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