© 2025 Galio.cl – Terminos & Condiciones info@galio.cl
Por un lado, la destrucción radical y hasta los cimientos de las estructuras que te guardaban, que pensabas inmóviles, te abruma con su realidad. Es Plutón en Acuario al que tendremos que acostumbrarnos, ¿qué lata verdad? Pero por otro lado, ahí están Venus en conjunción a Júpiter en Cáncer, que te regalan suerte allí donde sea posible encontrar, un cobijo estable, duradero y tal vez, cerrado para las no iniciadas.
Aries regida por Marte, dios de la guerra.
A ver mi cochita nanai: el estacionamiento de Neptuno cerquita de Saturno en tu signo significa entre otras cosas, ponerle disciplina a tus sueños más locos, y eso podría redundar en una transformación profunda de tu noción del yo, de ti misma, ¿que para ti es todo verdad? Será un proceso que dure años (ñañai), y que este agosto pedirá aprovechar las oportunidades de echarte brillo a ti misma con tus palabras, de hablar de ti con descaro tirándote flores, porque ahí puede haber una oportunidad de destacar entre las demás, que es lo que te nutre y te encanta. Así que chipe libre para ser egocéntrica, pero sin pasarse ya sabes etcétera.
Tauro regida por Venus, diosa del amor.
La estabilidad, una de las cosas que más te gusta en el mundo, se abre para ti con toda su fuerza invitándote, tal vez, a echar raíces en lo amoroso, en la amistad: a lo mejor te cambias de casa con una nueva víncula nueva nuevísima, a lo mejor te vas a vivir con viejas amigas o incluso nuevas, que se convertirán, al poco tiempo, también en viejas. O sea que período de disfrutar los frutos de ese esfuerzo de tora que solo tú conoces, que solo tú, puedes conocer en la contradicción que te atraviesa entre trabajólica y perezosa. Pero los planetas también dicen: cuidado con el egocentrismo, la soberbia puesta en palabras poco concretas, que no llegan a ningún lado sino que solo buscan aplastar.
Géminis regida por Mercurio, dios de la comunicación.
Un subidón te remueve, tambaleas porque tanto cambio imprevisto, incluso para ti que lo amas, puede que se te haga demasiado y quieras encerrarte a llorar un rato con las reales: un lado de ti que pocas conocen. Es que Urano es la apertura a lo radicalmente nuevo, y eso puede que se sienta como un retroceso a veces, pero porque se evidenciarán situaciones no del todo completas, no del todo cerradas que habrá que revisar con la potencia infinita de tu lenguaje, de tu mente. Momento para ejercitar la palabra desde lo creativo, sea inventando historias o causando estupor entre las que te rodean con tu ingenio sin límites.
Cáncer regida por la Luna, diosa madre.
Las más suertuda del zodíaco este mes, mi mami: porque las dos planetas más benéficas del sistema solar, Júpiter y Venus, se estacionan juntas en tu signo y eso es casi casi, un hoyo negro de buena suerte. O sea que período para desplegar tu amor sexual y amistoso, amarrar las vínculas que en el futuro, serán sostén y consuelo. Puede que haya situaciones que evidencien cierta falta de planificación, ciertos baches que habías tapado y que de repente, salgan a la luz. Pero no será grave, te escaparás fácil de ese problema. Tiempo de llevar tu cuerpo hacia un equilibro posible, de cariñearlo y frenar algún exceso.
Leo regida por el Sol, astro rey.
Hoy eres toda aprendizaje, sobre todo después del 11 de agosto en que Mercurio se pondrá directo y lo sentirás como un impulso hacia incorporar ese nuevo lenguaje que te fascina, que de forma imprevista puedes advertir como una nueva parte constitutiva de tu ser. La volá. Pero es así mi leona, mi puma, porque el cambio acelerado será la tónica por un tiempo largo, así que mejor ir preparada. Puede que aparezca una persona que te gusta y que ella sea venusina, curvilínea, magnética coqueta. Y habrá buenas oportunidades de concretar algo más que los encuentros superficiales de este siglo, y también, de poner orden en tus rutinas y dirigir ese mismo orden hacia un deseo muy íntimo.
Virgo regida por Mercurio, dios de la comunicación.
Los planetas se alinean para dirigirte hacia cierta misión que podrías tener en esta vida, no en la otra porque no sabemos si existe. O sea que puede que se te muestre, amable y claramente, hacia dónde debes dirigir cierto esfuerzo; esfuerzo porque será algo que te cuesta, pero que te completa. Y puede que haya saltos quizá, demasiado acelerados en este proceso, tanto que sentirás la necesidad de dar marcha atrás: normal, ñañai mi nerviosi preciosa. Como virginiana que eres, tus palabras serán siempre aliadas.
Libra regida por Venus, diosa del amor.
Tú que eres tan enamoradiza, tan coqueta y naturalmente, un poquito manipuladora (perdón), este mes te sentirás más caliente, más horny que de costumbre, como una fuerza que emerge de tu cuerpo y que pedirá, como todo en ti, un cierto equilibrio: la posibilidad del amor estará ahí para ser tomada, por eso, no cierres tu corazón por heridas que, ¡oh, sorpresa! Están más cerradas de lo que pensabas, siempre y cuando te fijes en ti misma primero, en tu libertad y tu deseo, y no en copiar, por empática y amorosa, los de las otras.
Escorpión regida por Plutón, dios de la muerte.
Mi bichita: ¿cómo estás? Yo diría que muy emotiva y eso te arrastra a una tensión entre, por un lado, sacar todo el llanto que llevas siempre guardado pero no de pena, sino de puro sensible, porque esa es tu manera de procesar el mundo; y por otro lado, esconderte resguardada más que nunca en un caparazón que, si tú quieres, puede ser inexpugnable, casi secreto, pues dejará entrar a unas pocas poquísimas según tu estilo. Momento para invertir en lo que ese caparazón tiene de luz: de comprarte plantas, de decorar según gusto millenial o centennial, de invertir plata en tu entorno seguro y estable.
Sagitario regida por Júpiter, dios del relámpago.
Yo te veo volátil, más que lo normal: por un lado, habrá llamados a poner un poquito más de esfuerzo en eso que quieres concretar, a insistir aunque no resulte y eso para ti es, por decir lo menos, difícil. Tocará ahí poner todo tu empuje, esa destrucción de los límites que te caracteriza, pero ahora para crear cierto espacio hogareño, que puede ser también filial o sexual; y así, enfrentar los pequeños imprevistos, las vicisitudes que irrumpirán de repente y te pondrán a decirte a ti misma: resuelve mami.
Capricornio regida por Saturno, dios del tiempo.
Yo diría que un buen mes, aunque no me creas porque eres tan, tan pesimista mi cabrita linda, confiable. Porque las situaciones se ordenan para hacerte ver, muy claro, que es tiempo de salirte de la ermitañez, que por ahora, abandones tu atalaya en el cerro y te juntes con las que amas, que fragües desde el colectivo, porque ahí estará la suerte y eso que tanto, tanto te gusta: la riqueza. Y también el sexeo, que como buena signa de tierra te atraviesa, igual que a Tauro. Momento de limar los cansancios que arrastra tu cuerpa bella; de dormir y ser perezosa sin culpa, en luz.
Acuario regida por Urano, dios del cielo.
Un mes donde los cambios se suceden con renovado impulso: mientras Plutón en su signa te adentra en la profundidad de ti misma para contemplar tu dolor y redimirlo, sanarlo y sacar de ahí algo brillante; Urano en Géminis te asalta con eventos fortuitos que te ayudan a resolver lo que nunca pensaste que pudieras resolver, porque actúa en connivencia con Marte en Libra para que saques tu poder, tu capacidad de protegerte más allá de cualquier límite, tu fuerza física que viene de estar, más conectada con las sensaciones de tu cuerpo.
Piscis regida por Neptuno, dios del mar.
Un descanso para ti, pececilla gozadora que solo quiere nadar tranquila en el estanque, conectarse sola con las filigranas del universo, sin moverte, lo que para ti es normal. El nodo norte en tu signo te impulsa hacia visualizar cierta misión muy íntima en sueños, en señales, en personas que llegan karmáticamente a tu vida para mostrarte el camino. La conjunción Júpiter-Venus en Cáncer te da fortuna y claridad en esos momentos clave, o sea, te da una estrella que podrías conseguir tener en la mano; o mejor aún, en la frente.
*